Por Daniela Turrubiates
Inicié en el mundo floral en el 2015 tomando un curso en el vibrante Mercado de Jamaica en CDMX, en ese entonces llevaba un estilo de vida muy acelerado, no lograba desconectarme de mi trabajo y me sentía estresada; quería una actividad de fin de semana que me conectara conmigo misma y me sacara de la rutina. Finalmente, en las flores encontré eso que buscaba.
En un mundo tan rápido y en el que cada vez es más difícil desconectarnos, se vuelve indispensable buscar un momento para practicar la atención plena o mindfulness. Hoy quiero compartir con ustedes una forma de lograrlo a través de las flores.
Paso 1. Comprar flores, una actividad de amor propio. Las flores tienen un impacto inmediato en la felicidad. Hay estudios que demuestran que tener contacto con ellas provoca emociones positivas y aumenta el sentimiento de satisfacción a la vida. Cuando visites la florería trata de ser consciente de lo que sientes al escoger tus flores, acércate y obsérvalas.
Paso 2. Vive la experiencia de las flores. Al arreglar tus flores intenta hacer el siguiente ejercicio: Describe los botones como si nunca antes los hubieras
visto y concéntrate en ver lo que está frente a ti. Por ejemplo: es color rosa, tiene pétalos suaves, huele a jardín de la mañana.
Paso 3. Sonríe mientras las colocas en el florero. Mientras arreglas tu florero, tómate un tiempo para inhalar profundamente y mientras exhalas relaja tu rostro y sonríe suavemente. Disfruta de ese momento.
Te invito a hacer de esta práctica un ritual mensual que además de embellecer los espacios de tu hogar u oficina, te ayudará a desconectar del ruido de la vida diaria, generándote una sensación de bienestar total.
No dejes de compartirme tus creaciones y de contarme
qué te pareció esta experiencia floral:
daniella.turrubiates@gmail.com / FB: @daniellaturrubiates97 / IG:daniellaturru
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